Ciudades en el Cine: “Mega City One” (Dredd, 2012)

La ciudad de los ajusticiados

[ por: Andrés Daly ]

La más grande pesadilla distópica del maldito Urban Sprawl, de las mega construcciones, del hacinamiento y  del crimen sin control existe desde 1973 y se llama «Mega City One». Tal como en «Do Androids Dream of Electric Sheep?», la novela de ciencia ficción escrita por Phillip K. Dick en 1968, y que se adaptara décadas después como «Blade Runner» (Ridley Scott, 1982); en el comic de Judge Dredd, donde Mega City One es la ciudad protagónica, gran parte de la tierra está absolutamente maldita. Largas extensiones de territorio se han vuelto inhabitables en nuestro planeta, por razones diversas, tanto en la novela de replicantes como en el comic del violento juez, entre ellas por las guerras ocurridas, la contaminación y la radiación; tristes razones de ser de estas nuevas-viejas y decadentes urbes-refugios. Si vivir en las colonias extraterrestres de «Do Androids…» es el sueño perfecto para escapar de la cocketelera cultural, contaminada y ultra vertical, en Mega City One el sueño es más simple: básicamente, se trata de sobrevivir.

Mega City One, la super ciudad

Sin ser ningún gran conocedor del cómic -aunque disfruté de varios números en mi adolescencia- me dejó, años después de leerlos, con la sensación de lo fascinante que sería tener a Mega City One como contexto de una película. La ultra violencia del misterioso personaje principal, siempre con su casco puesto, que es policía, jurado y juez en un mundo donde no existe más posibilidad para controlar el caos que tener estas psicopáticas figuras autoritarias, los «jueces», (in)morales verdugos en un mundo más sádico, cínico y cruel que ellos mismos, es memorable. Llegó 1995, llegó «Judge Dredd» protagonizada por Sylvestar Stallone y fuera de un par de memorables momentos que recuerdo al verla en el cine -como el destierro del personaje de Max Von Sydow a la tierra maldita- muy pobremente quedó algo de ese mundo experimentado en el papel (porque hey, ni siquiera existían los comics digitales entonces…sí, me estoy poniendo viejo) en una película que recuerdo como insoportablemente mediocre.

Fetish-City. Judge Dredd (1995)

El año pasado llegó la justicia. Se estrenó DREDD (2012), que si bien se experimenta como un largometraje-videojuego bastante encerrado y claustrofóbico, es una bastante competente película que algo nos dejar ver a Mega City One, tanto al interior de dos de sus super mega estructuras (un gigantesco edificio de vivienda de más de 200 niveles, prácticamente una ciudad en sí misma, y, al inicio, un enorme cuartel de policía o mas bien dicho, The Hall of Justice, desde donde salen los jueces a la ciudad), como también algunas de las calles de esta decadente y ridículamente enorme ciudad. La película de acción y ciencia ficción no está nada mal -aunque es un tanto primitiva y simple en su guión- y sorprende, principalmente, al saber reflejar esa cautivante belleza de la muert y de la brutal violencia que el comic regalaba en algunos de sus dibujos, con unas increíbles secuencias en 3D acompañadas de una cámara extremadamente lenta (!) y una buena porción de agradecida osadía al no querer maquillar el brutal impacto de las balas, que el juez les regala cariñosamente a un montón de personajes desechables.

Imagen superior e inferiores: Mega City One en «DREDD» (2012)
Desde la tierra maldita.
Bordes

Lo que sí no aparece por ningún lado en esta película es el cinismo, la crueldad y el humor negro que recuerdo del comic y que otras películas, como RoboCop (Paul Verhoeven, 1987) en su espantosa/maravillosa visión de  la decadente Detroit, sí sabían transmitir con inteligencia. Es que la inteligencia en el cine de acción, últimamente, es un bien escaso, qué se puede decir.

Los dejo con capturas que hice de la ciudad de Mega City One en esta película protagonizada (perfectamente, hay que agregar) por Karl Urban, en su voz más rasposa. 800 millones de habitantes en un territorio tan grande como la unión de todas las ciudades entre Boston y Washington, y en donde sólo sobreviven los más fuertes.

Nota: La película fusiona imágenes CG digitales con sets interiores, maquetas y locaciones reales -manipuladas- en las ciudades de Johannesburgo y Cape Town, en África.

 

Los Mega Edificios, Arquitectura monumental (y espantosa) distribuidos por toda la ciudad.
Las poblaciones y los drones
La Ley también está amurallada, dentro de la ciudad amurallada

Tragaluz de Peach Trees, el mega edificio donde ocurre el 99% de toda la película.

Juegos en altura. Skate en Peach Trees.
Guerra entre niveles, dentro de Peach Trees
Los jueces llegan a la plaza interior de Peach Trees.